Ejercicio de la ciudadanía: una cuestión de derechos

Durante los días 18, 19, 20 y 21 de diciembre se realizó en la Habana la Reunión Nacional para promover el fortalecimiento del ejercicio de la ciudadanía. En el encuentro, participaron profesores de la Universidad de La Habana con el objetivo de ampliar los conocimientos en temas jurídicos y legales dentro de las redes comunitarias del Cenesex.
La cita formó parte del cronograma de actividades previstas del donativo del Consejo de Orientación e Investigación Integral (COIN).

Durante la cita se supo que con las leyes actuales podríamos lograr mucho, pero no tenemos aún a las personas debidamente sensibilizadas con asuntos que pasan por una interpretación y cercanía emocional con los hechos.

Aunque el Estado cubano garantiza derechos humanos fundamentales como el acceso a la salud, la educación y la cultura, su ejercicio debe ser más inclusivo para permitir la realización personal y participación social plena de grupos vulnerables.

La igualdad es un valor indiscutible dentro de la Constitución, es visto como un eje vertebral. La dignidad debiera ser el valor superior según nuestra Constitución; “vivir como quiera, vivir bien y vivir sin humillaciones”. De ahí que la dignidad dentro lo jurídico es un principio constitucional como derecho, apuntó la doctora en ciencias jurídicas Mirtha Prieto, profesora titular de la Universidad de La Habana.

“Los valores son transversales. Se necesita de una cultura jurídica que frene el desconocimiento que existe en la actualidad; ello es lo que le permite a la sociedad en sí misma privarse de derechos”, destacó el doctor en ciencias jurídicas Yan Guzmán Hernández, profesor titular de la Universidad de La Habana.

Para la doctora  Martha Prieto, la trilogía necesaria deviene de la libertad, la igualdad y la intimidad. Ellos son los derechos esenciales del ser humano para la realización de su personalidad.

De ahí que el ejercicio y práctica de los mismos estén vinculados al deber de cumplir la ley dentro de los ámbitos de actuación social y el orden público.

Para la doctora Prieto sin dudas lo más importante es la libertad, ya que su expresión concreta es a través del principio de no discriminación. “No basta con defender igualdad social y de género en nuestras políticas, sino hacer estrategias de inclusión que reconozcan que incluir es un valor más dentro de la humanidad”.

Destacó además que los derechos esenciales para el ser humano han de tener la fuerza y el apoyo del Poder y el Derecho, como vía para expresar eficazmente el reconocimiento de la dignidad humana.

En el encuentro se supo que inclusión también significa de todos en todas las esferas de la vida social. Los tribunales requieren de la obligación de brindar tutela efectiva en todo caso.

Además, en el encuentro se debatieron cuestiones con el quehacer de los activistas de las diferentes redes comunitarias del Cenesex. Para el licenciado Ulises Padrón, coordinador nacional de la red de Jóvenes por la Salud y los Derechos Sexuales, el activismo es un plus para operar dentro de la sociedad actual. “Es la posibilidad y el mecanismo que tenemos para demandar sobre determinadas cuestiones que no están bien; es por ello que cuando hablamos de activismo, hablamos de participación”.

Además abogó por priorizar la superación profesional de los juristas y operadores del derecho y estimular la sensibilización en género, igualdad, diversidad, masculinidades y prevención de la violencia.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados*.


*