Ayudar a materializar, en los países de Latinoamérica y el Caribe, acuerdos internacionales que pretenden el desarrollo equitativo, agrupa en La Habana a personas expertas de la región, en la Reunión sobre Programas y Estrategias de Educación Integral de la Sexualidad LAC, convocada por el CENESEX.
“Con esta reunión nosotros nos proponemos fortalecer, impulsar y movilizar todas las alianzas que existen en nuestra región a nivel gubernamental y de la sociedad civil, en vínculo estrecho con las agencias del Sistema de Naciones Unidas (UNFPA, UNESCO y otras)”, precisó, durante la inauguración del evento, la directora de CENESEX, Mariela Castro Espín.
La sexóloga definió la Reunión como continuidad de “uno de los tantos (trabajos) que se han iniciado en nuestra región”. Si bien, señaló que “debemos dar una pequeña contribución a todos estos esfuerzos”.
“Esta reunión y muchas otras deben generar una mirada de por dónde va el cumplimiento de estas metas y cuáles son sus principales obstáculos para poder avanzar”, apuntó.
Según la experta, los procesos emancipatorios de los países latinoamericanos y caribeños no han concluido. “Nuestros países lograron salir de un fuerte sistema colonial. Pero no hemos logrado que la región sea plenamente libre de formas de dominación neocolonial”, agregó.
En su discurso inaugural, la anfitriona de la Reunión definió a América Latina y el Caribe como “la más inequitativa del mundo”, si de distribución de las riquezas se habla.
“Las mujeres continúan ocupando la posición más desventajosa”, resaltó citando informes de Habitat y la CEPAL.
Por su parte, en la apertura de la cita, la Coordinadora Residente del Sistema de Naciones Unidas en Cuba, Barbara Pesce-Monteiro subrayó que el territorio se destaca por “las altas tasas de embarazo y maternidad temprana… la persistencia de mortalidad materna por causas prevenibles, la tendencia al incremento de las ITS y el VIH/sida, así como el abuso sexual y la violencia de género”.
Sin embargo, Diego Palacios Jaramillo, Director de UNFPA para Cuba y República Dominicana, resaltó que “América Latina es la región que más experiencia ha tenido” en educación sexual.
Palacio Jaramillo señaló que, pese a los avances, los “cambios institucionales, tienden a diluir el apoyo de nuestros gobernantes.
Los antecedentes
Castro Espín declaró, como premisas de la Reunión, a los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), la Declaración Ministerial de la Ciudad de México “Prevenir con Educación”, resultado de la XVII Conferencia Internacional sobre sida (México, 2008), y Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (El Cairo, 1994).
“Sobre todo el Programa de El Cairo, situó al ser humano y sus derechos como eje central de los objetivos y acciones”, afirmó.
Mientras, ratificó que, por primera vez, en El Cairo se “llamó la atención sobre la importancia de la salud sexual y reproductiva” y se abogó “por los derechos de las mujeres y las niñas”.
Sobre la Declaración de México, Jaramillo Palacio aseguró que “los acuerdos surgidos de la declaratoria no se han cumplido”.
Asimismo, criticó los ODM en los temas de educación, limitándolos a la reducción de la “brechas de acceso a la educación y la diferencia de acceso entre hombres y mujeres, niños y niñas”.
“En estas metas no se discutió acerca de la calidad de esta educación”, denunció. Y agregó que “en muchos países se han cerrado en términos de sexos. Pero la calidad de esa educación, con la educación sexual al centro, es algo que no se ha discutido”.
Si bien, Pesce-Monteiro coincidió en que estos documentos “se convierten en herramientas estratégicas para asegurar el acceso a educación en sexualidad y servicios de salud sexual y reproductiva de calidad e integrales”.
“En ambos casos, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha decidido prorrogar su seguimiento, en reconocimiento a la persistencia de los problemas que les dieron origen”, advirtió Pesce-Monteiro.
El contexto
Para Palacio Jaramillo, “este evento se da en un momento en que la comunidad internacional está comenzando a discutir lo que será la nueva agenda de las nuevas Metas de desarrollo internacional”.
El Director de UNFPA para Cuba aseguró que “las nuevas metas deberían comenzar a hacer énfasis en… los derechos humanos, y dentro de ellos tiene que estar la educación sexual… y en la sostenibilidad y la eliminación de las inequidades.
La Reunión de La Habana “debería aportar elementos que permita la discusión de estos temas en las Metas del milenio”, consideró. También exhortó a los gobiernos latinoamericanos a “mover estos temas en las discusiones sobre la Agenda del milenio”.
En este sentido, la sexóloga cubana reconoció que “todo fue motivado por el CENESEX, que está en un proceso de coordinación de la Estrategia de Educación Integral de la Sexualidad”. Para ella, “encontrarnos” es la “mejor manera de avanzar”.
Mientras, la representante residente de NNUU, resaltó el rol del Programa Nacional de Educación y Salud Sexual (PRONESS), liderado por CENESEX, por la “gran ventaja” que tienen cubanas y cubanos, de “tener el apoyo institucional”.
Además, elogió que entre los objetivos del PRONESS figure “la educación de la sexualidad sin elemen¬tos de discriminación sexista, en las diferentes etapas de la vida y como parte de la formación integral del individuo, y promover la salud sexual como un elemento fundamental de la calidad de vida de todas las personas a partir de educar en el respeto a los derechos sexuales”.
La Reunión se realiza con apoyo de la Oficina Regional para América Latina y el Caribe del Fondo de Población de Naciones Unidas (LACRO) y la Oficina del Fondo de Población de Naciones Unidas en Cuba (UNFPA).
A la cita asisten 57 expertas y expertos de Ecuador, Perú, Argentina, Uruguay, México, Guatemala, El Salvador, España, Nigeria y Cuba.